Fluye como el agua

Fluye como el agua

martes, 13 de julio de 2010

Dolor de espalda


DOLOR DE ESPALDA


Es increíble la cantidad de personas con problemas serios de columna que estamos viendo los profesionales últimamente, tal vez seas una de ellas, pero más asombroso es ver a personas cada vez más jóvenes con estos problemas, en su mayoría derivados del sedentarismo , el sobre esfuerzo y las malas posturas que una y otra determinan.

Gracias al estilo de vida que estamos llevando, corriendo de un lado para el otro sin parar o por el contrario sentados todo el día frente a la computadora, lejos de disminuir, todo hace esperar que el problema aumente, pero más grave aún es comprobar la poca respuesta que tiene el sistema médico formal para esta grave y cada vez más frecuente patología.

Por eso un poco impresionados y otro poco cansados de ver el aumento de estos problemas con un tratamiento casi exclusivamente centrado en los analgésicos y anti-inflamatorios, -con una tendencia a ofrecer rápidamente analgésicos mayores como el tramadol-, hemos decidido hacer algo al respecto.

No estamos negando la utilidad de la farmacia, porque de hecho yo mismo no tengo más remedio que recurrir a ella a diario con tal de paliar el dolor de los paciente, sino que estamos intentando poner el énfasis en una verdadera re-habilitación que además de la educación como eje central, incluya la utilización de herramientas complementarias al tratamiento convencional para que todo se potencie.

Por eso creemos que a menos que se comprenda donde está el verdadero problema, nada podremos hacer, tampoco de nada sirve que el Terapeuta lo comprenda, quien realmente tiene que comprender donde está el problema eres tú como paciente, porque es en función de esa comprensión que podrás comenzar a hacer algo.

¿Qué hacer?

En primer lugar, entender que ante un problema “mecánico” como la mayoría de los que se producen a nivel de la columna vertebral como puede ser un pinzamiento, una escoliosis, una rectificación cervical, etc. la química no funciona más que transitoriamente, y que no hay solución posible a menos que el afectado se involucre activamente en su propia rehabilitación.

Si porque jamás en tu vida has hecho el más mínimo ejercicio y no estás dispuesto a comenzar ahora y si por la misma razón la solución química te resulta cómoda, está todo dicho, este artículo no es para ti, pero antes de dejarlo mejor que comiences a proteger el estómago porque pronto comenzará a sufrir como loco por tantos analgésicos.

Si por el contrario sos de los que cree que en tu trabajo realizás demasiado ejercicio cuando en realidad lo que hacés es sobrecargar tu columna sin compensar luego porque tampoco te agrada moverte para hacer un mínimo de “mantenimiento”, estás en la misma situación.

Incluso si la razón de la inmovilidad es el dolor, no es práctico quedarse totalmente quieto, ya que eso lo único que genera es más problemas.

Así que si eres de los que sufren por este problema, si querés cambiar, vas a tener que incomodarte!, porque lo que hasta ahora te ha resultado “cómodo” ha sido justamente el origen de tu problema.

La Solución

Es tan simple como compleja, hay que empezar a moverse .

Es simple porque alcanzaría con comenzar a practicarlo, compleja porque el peor enemigo es uno mismo y hasta que no se logre vencer la inercia y la comodidad nada mejorará, por el contrario, empeorará, ¡entonces!…,

…¿qué estás esperando para empezar a moverte?

-¡Más!, dicen algunos pacientes pensando que ya se mueven mucho cuando en realidad lo que hacen es correr estresados. El movimiento al que hacemos referencia debe ser la contracara del movimiento que hacemos en nuestra rutina diaria.

El Chi Kung en este sentido es ideal, ya que la mayoría de sus series de ejercicios logran movilizar de forma amable pero intensa toda la estructura, la psiquis y el espíritu adaptándose a las necesidades individuales.

Mi sugerencia: que busquen un grupo de Tai Chi/ Chi Kung les aseguro que no se arrepentiran!
Dr. Ernesto Velázquez (Uruguay)